Restauración y remodelación de una segunda residencia de 150m2 y 200 años de antigüedad, distribuida en dos plantas más buhardilla, dentro de un pequeño núcleo urbano, con vistas al Castillo y al río. El estado original de la vivienda presentaba graves problemas en forjados y cubierta, que se han tenido que sustituir. Se accede desde la planta baja directamente al salón-estar de la casa, está también la cocina y un pequeño baño de cortesía. Mediante una escalera de losa plegada al aire, se accede a la segunda planta, allí se han ubicado los dormitorios que mantienen sus puertas originales de cuarterones restauradas y un baño completo. Una escalera de tramo recto da acceso a la buhardilla, con cubierta a dos aguas realizada en su totalidad con Pino de Soria. Se ha instalado un pavimento continuo de microcemento, recuperando en la planta baja, dos pequeñas zonas de baldosas hidráulicas, originarias de la vivienda.